Las técnicas de defensa personal fueron en principio tomadas de las artes marciales tradicionales y perfeccionadas y depuradas con el objeto de hacer máxima su efectividad y de adaptarlas a las hipótesis de conflicto en las condiciones actuales de vida.
En defensa personal se utilizan técnicas sencillas, con lo que se tratan de evitar los movimientos complejos.
Principalmente se utilizan bloqueos, retenciones y palancas de modo de reducir al adversario lo más rápido posible y acortando los tiempos de combate para evitar riesgos y dejar en segundo plano diferencias físicas.
La defensa con palma desnuda, puede complementarse con armas propias o impropias, ya sean cuchillos o armas de fuego o cualquier elemento al que podamos acceder en el momento del conflicto.
En el ámbito civil se intenta reducir al adversario de manera segura y sin provocar daños desmedidos dada la responsabilidad civil de la acción defensiva cuando se exceden los límites de la legítima defensa.
Nuestros clubs afiliados forman parte activa de una comunidad comprometida con la enseñanza y el desarrollo de las artes marciales y deportes de contacto. Desde escuelas tradicionales hasta gimnasios modernos, todos los centros que aparecen en este listado cumplen con los estándares técnicos, éticos y organizativos exigidos por nuestra entidad.